miércoles, 30 de diciembre de 2009

No lo iba a hacer...

Peeeeeeero, como para Navidad no pude escribir nada porque no tuve tiempo (Ni demasiadas ganas. Sepan disculpar. A esta altura sinceramente ya es un milagro que me levante a la mañana) ahora no puedo no dejarles a ustedes, mis queridos y escasos lectores, un saludo de fin de año; no porque sino quedaría mal y por ahí se me ofenden y dicen “¡Ah pero mirá este roñoso! Todavía que venimos y le leemos las giladas que escribe no es capaz ni de dejarnos un mísero saludo para las fiestas. Que tipo vago y desconsiderado. Que barbaridad. Si no fuera que es tan pero tan atractivo sería una porquería de persona” o cosas por el estilo, sino porque me siento completamente impregnado de amorosos sentimientos y buenos deseos que necesito compartir con aquellos que me han acompañado durante este año.

No, mentira ... Que la inocencia les valga (Si, ya se, el Día de los Inocentes también ya pasó. Bueno, que se le va a hacer ... Peor es nada).

La verdad es que lo hago porque sino queda medio mal y hay que cuidar las apariencias (y tiene que parecer que me importan sus sentimientos y que yo mismo tengo sentimientos y eso. Claro que no es así. Yo soy hombre y los hombres no tenemos sentimientos. Esas son cosas de mujeres y de putos).

De todas formas, si están esperando que me lance ahora a escribir una generosa sucesión de buenos deseos, llenos de optimismo, esperanza, afecto y otras cosas así medias sentimentaloides como hace la mayoría, pónganse cómodos y sigan esperando porque no lo voy a hacer.

Si les voy a dejar, en cambio, una verdad irrefutable, realista y llena de sabiduría.
Una verdad de esas que seguramente no les gusta escuchar porque hace temblar los cimientos mismos de sus pequeños y frágiles mundos de fantasía, llenos de arco iris, unicornios, flores y hadas mágicas.
Una verdad que solo aquí van a encontrar, porque aquí no nos andamos con vueltas ni eufemismos. Mayormente porque no tengo idea de lo que es un eufemismo. Y, dicho sea de paso, tampoco tengo idea de por que puse “andamos” así en plural, si en realidad estoy solo.
Bueno, la cosas es que, les guste o no, esto algo que deben saber.
¡Ya es hora de que crezcan, caramba!

Presten atención:

Por mas que todo el mundo les desee que tengan un feliz y próspero año nuevo, el año que viene va a ser tanto o mas choto y miserable de lo que fue este que se termina.
Y esto es así, simplemente, porque con los deseos solos no hacemos nada, por mejor intencionados que estén.
Que el año que viene sea mucho mejor que este que pasó, depende única y exclusivamente de cada uno, de las decisiones que tomen, de los riesgos que estén dispuestos a correr, y de las ganas, verdaderas ganas, que tengan de cambiar de una buena vez lo que no les gusta de sus vidas.
Si son de los que por estas fechas suelen decir “por fin se terminó este año de mierda” llenos de frustración y sintiendo que siguen estancados y sin grandes perspectivas, sepan que lo único que va a evitar que dentro de un año estén diciendo exactamente lo mismo, es el valor con el que estén dispuestos a vivir cada día del nuevo año que comienza.
Porque que el año que viene sea un feliz año, no depende mas que de lo dispuestos que estén a lograr que así sea.
Porque ser feliz, mas allá de todo y a pesar de todo, es una elección. Nada mas.

Y así, luego de haber iluminado un poco sus caminos, y haberles dejado gratuitamente una enseñanza de libro de autoayuda de sesenta pesos, procedo a retirarme (Levitando, por supuesto, como lo hacemos los seres iluminados).

A todos los que durante este año pasaron por este sitio, gracias por la compañía.

Y espero, sinceramente, que logren hacer del año que viene un verdadero feliz año nuevo.

Será hasta entonces.

viernes, 18 de diciembre de 2009

Yo no soy Papá Noel. No insistan

Desde hace dos semanas, con mi mujer estamos en plena campaña para comprar los obsequios de Navidad para la familia.
Todos los santos años, mas o menos desde Noviembre empezamos a decir que vamos a ir comprando los regalos de a poco, con tiempo, para no tener que andar después a última hora como desaforados, luchando contra esa marea de boludos que también dejan todo para último momento y andan corriendo como desquiciados matándose por alguna chuchería pedorra en cuanto local encuentren con las puertas abiertas.
Obviamente, lo que todos los años sucede es que terminamos como dos desaforados luchando contra la consabida marea de boludos desquiciados porque, al final, jamás compramos nada y debemos andar a las corridas a último momento como el resto de los mortales.

Pero este año no.

Este año nos pusimos la pilas, le pusimos onda, y nos dedicamos desde hace un tiempo a concretar el plan.

Y casi casi lo logramos.

Y digo casi porque hasta hoy, a escasos días de la fecha, tenemos resuelto digamos el 90% de la situación. O sea, la familia está cubierta y tendrá sus obsequios.
Solo se nos quedó en el tintero el pequeño detalle de que nos olvidamos de comprar los regalos para nosotros.
Esto significa que esto va a tener que realizarse en el día de mañana.
¿Y que día es mañana?
Es el último fin de semana antes de la Navidad.
O sea, es el día en que la gran mayoría de la marea de boludos que dejan las cosas para último momento va a salir con los ojos desorbitados y las fauces babeantes a invadir cuanto comercio, calle comercial o sitio de regalos exista en kilómetros a la redonda.
Y en esas condiciones, yo que odio comprar regalos (no porque no quiera regalar, sino porque nunca sé que comprar salvo que me lo pidan directamente), y mi mujer que adora comprar pero que es terriblemente hinchapelotas a la hora de elegir algo, una vez mas debemos lanzarnos a la epopeya de conseguir, sino lo que deseamos, al menos algo medianamente decente (y por mi parte espero que también baratito) para poner al pie del árbol.

Y encima creo que para mañana pronostican lluvia.

Va a estar buenísimo. No puedo esperar a que llegue mañana. Que lindo día va a ser mañana. Uy si ...

(No quiero ser pesimista pero si no paso la Navidad divorciado y en cana, pega en el palo).

Y ya que estamos en tema, y atento a estas emotivas fechas que se aproximan y al profundo sentimiento de paz y bondad que se apodera de los corazones de la gente y del cual nadie puede escapar (excepto yo que sigo pensando que la Navidad es una grasada y una época en la que la mayoría de la gente saca a relucir su mayor grado de hipocresía y falsedad), la pregunta del día es doble y es la siguiente:

¿Qué les gustaría recibir de regalo esta Navidad y que es lo que efectivamente creen que van a recibir?

Aclaro que para la primer parte debe ser un objeto o algo que pueda comprarse con plata. Y algo que deseen mucho. Cualquier cosa, pero material. No me vengan con la paz mundial, el amor al prójimo o una pareja nueva. Esas cosas no las van a conseguir nunca. Asumanló. Ahora sean materialistas y honestos (Papá Noel lee este blog. Aprovechen que por ahí tienen suerte).
La segunda parte creo que se explica por si sola.
Uno mas o menos conoce a sus parientes y tiende a sospechar con que se pueden despachar.
O me van a decir que nunca recibieron un odioso par de medias de parte de una tía vieja.

Bueno, ahí tienen. Tema 1, Tema 2. Los el fondo se callan. Comiencen.

Como es medio temprano todavía no digo que pasen felices fiestas y eso, pero por si no llego a volver a escribir (vieron que soy un tipo muy ocupado) esto vale como saludo.

Por lo pronto, que pasen un buen fin de semana.

jueves, 17 de diciembre de 2009

Disculpá gorda...

Día indefinido. Retorno a mi hogar luego de un agobiante y poco feliz día de trabajo, en el colectivo que, como siempre, viene atestado.
Yo, para variar, parado, ubicado de frente a la fila de dos asientos.
En el asiento del pasillo, sentada y profundamente dormida, una gorda.
En un momento, y producto de los vaivenes del transporte, la gorda comienza a desplazarse. Mas precisamente, se me empieza a venir encima.
Y cuando digo venir encima, me refiero específicamente a que su regordeta cara se inclinaba cada vez mas y mas hacia mi … como decirlo para no decir poronga que quedaría muy feo ... a ver ... hacia mis partes privadas.
Yo, con gente a ambos lados, estaba imposibilitado de moverme y me iba sintiendo cada vez mas incómodo.
La gorda no se despertaba, y cada curva o movimiento lateral del vehículo la acercaba mas y mas.
Finalmente la situación llegó a un punto límite.
La cara de la gorda estaba a tan solo dos centímetros de mi ... bueno ... de ahí.
Irremediablemente, en la próxima curva, el contacto iba a ser inevitable.
Y encima ya había un par de testigos que se habían percatado de la situación y no dejaban de mirar de reojo.
Yo miraba el camino, calculando la distancia hasta la próxima curva. Me sé el camino de memoria. Sabía que no faltaba mucho. Tenía que tomar una decisión. Y la tomé.
Aprovechando un mínimo movimiento, exageré el vaivén y con mi mochila, la cual llevo en la mano y no puesta en la espalda como hacen tantos cabeza de termo, le aplique un ligero golpecito en la gamba a la gorda durmiente.
La rolliza soñadora se despierta sobresaltada y me lanza una furibunda mirada de indignación.
Yo la miro arqueando las cejas y poniendo cara de “¿Qué te pasa Porky? ¿Te desperté?”
“Me diste un golpe con la mochila” me dice la gorda atrevida “Tené mas cuidado”.
“Fue sin querer” dije yo medio caliente “Además te me estabas viniendo encima”.
“Bueno, yo estoy dormida. Hay otras formas de despertarme” retruca la gorda buscaroña.

Y ahí fue cuando, como un flash, una respuesta se me cruzó por la mente.

Una parte de mi me decía “¡No! ¡Ni se te ocurra decirle eso! Decí “Bueno disculpá” y terminá con la discusión. No seas infantil”, mientras que la otra me gritaba “¡¡Siiiiiiiiiiii!! ¡Deciselo, por favor! ¡¡Deciselo que me muero!!”.

Y, por supuesto, prevaleció la segunda voz.

“Bueno disculpá gorda, lo que pasa es que estabas tan cerca que me agarró miedo de que me la muerdas pensando que era un pancho” le dije.

La gorda abrió la boca casi tan grande como los ojos y amagó como a decir algo, pero no le salieron las palabras.

Afortunadamente, justo en ese momento, alguna gente se bajó y pude moverme hacia atrás.

La gorda se quedó ahí con la boca abierta y roja de furia, y yo hice el resto del viaje riéndome solo.

viernes, 11 de diciembre de 2009

No pasa nada no pasa

Habrán notado, supongo (aunque no me atrevería a asegurarlo dado el interés que este sitio está generando últimamente) que no he estado muy activo que digamos.
Para decirlo claramente, estoy escribiendo bastante salteado (y cada vez peor, pero eso es inevitable. Todo no se puede). Cada muerte de avispa, como reza el dicho popular (cosa que no me parece muy acertada. No se cual es la vida media de una avispa, pero no creo que sean bichos tan longevos o tan indestructibles como para que su muerte sea un hecho llamativo. Pero bueno, vaya uno a saber quien inventó el dicho. Viste como son estas cosas).
En fin, la cuestión es que debido a esto yo ahora debería decir, como suelo hacer en estos casos, “y se estarán preguntando ahora el por qué de estas ausencias o se devanarán los sesos especulando sobre las causas de esta merma en la productividad” y todo eso que siempre digo antes de comenzar a relatar lo que pasa, pero, miren lo que son las cosas de la vida, hoy no lo voy a hacer.
No. No digo nada y no cuento nada. ¿Por qué? Porque si. Porque hoy estoy en ortiva y no tengo ganas.
Y porque además entre que se muy bien que mucho no les importa y entre que mi vida está cada vez mas aburrida, tampoco es como que tendría un material así desopilante para desarrollar, así que ni me tomo la molestia.
¿Vieron? Soy una caja de sorpresas. Cuando parece que voy a hacer una cosa, ¡Zaz! Yo agarro y hago otra. Y ¡Plop!, ustedes se quedan así desorientados. Y ¡Paf! Algo se cae en algún lado. Y ¡Guau guau! Un perro ladra en algún lugar. Y ¡Prrrrrrrrrr! Alguien se desgracia y se hace el boludo (o le echa la culpa la perro). Y ¡Pim! ¡Pam! ¡Pum! Yo sigo con esto de los ruiditos aún cuando el chiste ya perdió la gracia.
Es así. Nunca se termina de conocerme.
Eso es lo que me hace tan interesante como persona.
Eso y que soy un organismo bio cibernético venido de una galaxia lejana para estudiar la forma de vida de seres primitivos como ustedes con la orden de destruir este planeta pulguiento si veo que realmente no les da, pero como eso es un secreto intergaláctico que nadie conoce, obviamente la causa de mi atractivo es la otra.

Así que, bueno, la cosa es que no pienso contarles nada.

Por ejemplo, no les pienso contar lo que me pas … lo que le pasó a un amigo mío que el otro día se fue a reunir con unos conocidos a la salida del trabajo para tomar algo y charlar, y que luego de la agradable reunión, cuando llegó el momento de la vuelta, mi amigo, que tiene una increíble facilidad para desorientarse, en lugar de agarrar para el lado de la calle que tenía que agarrar, agarró para el lado contrario y terminó re perdido (porque encima tiene eso de que se autoconvence de que está yendo bien y se larga a caminar como un boludo sin tener la mas mínima idea de donde está o adonde cree que llegará), a las once de la noche, rogando que apareciera un puto taxi porque terminó medio debajo de una autopista, en un lugar bastante poco propicio para estar perdido.

Ni tampoco les pienso hablar del otro día cuando en el colectivo, que venía recontra lleno como de costumbre y con un calor de perros, me tuve que bancar que una gorda espantosa y toda chivada me estuviera apoyando sus enormes, flácidas y húmedas tetas en la espalda durante todo el viaje, y que cada vez que me daba vuelta para mirarla mal, como respuesta recibía una estúpida sonrisita que no pude mas que interpretar como de intento de seducción, lo cual me provocó náuseas de todo tipo y ganas de arrojarme por la ventanilla mas próxima.

No. No voy a contar nada. Se joden.

Y hasta estoy tan así mala onda que ni iba a poner pregunta, pero me di cuenta de que hay un tema de suma importancia que no puedo dejar pasar, así que no me queda mas remedio que hacer el esfuerzo.

Ay Dios. Bue … A ver ….

Como todos sabrán, (porque supongo que habrán tenido la delicadeza de anotarlo en sus almanaques, como corresponde) en el día de mañana se celebra un nuevo aniversario de mi nacimiento. O sea, es mi cumpleaños por si no quedó claro.
Debido a ello, y a pesar de que ya lo he hecho con anterioridad (¿Que quieren? ¿Originalidad? ¿A esta altura? Pssss ¡Por favor!), la pregunta que dejo plasmada en el día de la fecha es la siguiente:

De tener el inmenso honor de poder llegar hasta mi persona en este importantísimo día ¿Qué obsequio me haría?

Para los que ya respondieron la otra vez que lo hice, aclaro que no vale repetir.
Si no se les ocurre nada, dejo en claro que acepto efectivo, así que de última tiren una cifra. O mejor aún, no sean tímidos y mándenla en un sobre.

Y ahora me retiro a disfrutar de mis últimas horas de juventud.

Y me retiro satisfecho, por no haber contado nada. Ja Ja. Soy implacable….

jueves, 26 de noviembre de 2009

Crítica de cine: LUNA NUEVA

Como sabrán, y si no lo saben les cuento, esta es la continuación de “Crepúsculo”, aquella recordada paparruchada romántica que se estrenó a fines del año pasado, y que hizo las delicias de cuanta adolescente hormonalmente desequilibrada andaba por las cercanías de las salas cinematográficas.
Fue gracias a eso, y a una muy bien montada campaña de marketing destinada a un público decididamente adolescente, que esta mediocre tirando a mala saga hoy termina por transformarse en un verdadero suceso que cuenta, incluso, con seguidores tan acérrimos que son capaces de pegarte un bife si les hablás mal de sus adorados vampiritos.
Por si no vieron aquella primer entrega, y a fin de que no se queden en pelotas y sin saber de que se trata, pueden hacer clic acá … no, mejor acá … no, no, tampoco …. Acá. Si, ahí si, y leer la crítica que con tanto cariño realicé en aquel momento.
De esta manera ustedes se actualizan en como viene la historia y, de paso, yo me ahorro el engorroso trabajo de tener que hacer una reseña de la misma.
Dicho esto, pasemos a lo que nos compete:


Sinocsi

En esta oportunidad, la historia inicia el día del cumpleaños de Bella quien, como había estado soñando que se convertía en una vieja chota y se daba cuenta de que iba a quedar medio mal seguir andando con un pibe que se seguía viendo como de veinte años (porque Edward es vampiro y, como todos saben, los vampiros no envejecen), andaba así medio amargada, poniendo cara de culo cuando alguno la saludaba, y dejando bien en claro que no tenía ni la mas mínima intención de festejar ni de soplar la vela.
Sin embargo, a su muy entusiasta cuñada vampira Alice, esto no le importó un pomo y, sin que Bella lo supiese y de puro metida nomás, esa misma noche le organizó una fiesta sorpresa ahí en la casa de los Cullen, su familia política vampira.
A Bella medio que no le gustó mucho la sorpresita, pero como ya estaba ahí, estaba exageradamente caliente con el paparulo de Edward y quería estar con él y, además, iba a quedar muy mal si se iba a la mierda, intentó ponerle algo de onda.
Todo marchaba normalmente como en cualquier fiesta, con saludos de compromiso, regalos, sanguichitos de miga, chistes verdes y fotos, cuando de repente, al intentar desenvolver uno de los obsequios, la mamerta de Bella va y se corta un dedo con el papel.
“Uh” dice Bella “Dicen que si te cortás con papel te morís jejeje”, y cuando levanta la vista para ver quien se estaba riendo por su ocurrencia, se aviva de que está sangrando en una casa llena de vampiros que, de repente, la habían empezado a mirar como si fuera un pollo al spiedo; en especial el trolazo de Jasper que ya se empezaba a relamer mientras se ponía una servilleta en el cuello (Por si no lo recuerdan, este pibe fue el último del clan convertido en vampiro y todavía no está del todo domesticado. O algo así. O sino es el mas comilón. No se. No me acuerdo).
“¡¡No, no!! ¡¡No es sangre!! ¡¡Es ketchup!! ¡¡Es ketchup!!” grita Bella medio nerviosa y creyendo que los Cullen, además de vampiros son boludos pero, por desgracia, ya es tarde, porque Jasper se pone como loca y al grito de “¡¡¡¡¡¡Comiiiiiiiiidaaaaaaa!!!!!” se arroja sobre la joven con intenciones de cenársela de una chupada ahí mismo.
Afortunadamente, Edward, que estaba ahí cerca comiendo unos chizitos y poniendo sus consabidas caras de constipado, logra interponerse entre ellos, y medio a los sopapos evita que su novia termine siendo el plato del día.
La situación no pasa a mayores salvo por el hecho de que la fiesta termina arruinada, quedaron todos medio molestos, Jasper se fue llorando a su habitación sin cenar, la casa quedó hecha un desastre, sobró un montón de comida y gaseosa y, además, a Edward le cayó la ficha de que para Bella es demasiado peligroso seguir andando con él y su familia.
Debido a esto, y también a que en el pueblo ya se habían empezado a avivar de que en la familia Cullen nadie envejecía, aún a pesar de que lo desgarraba por dentro (o lo tapaba, a juzgar por las caras que pone), Edward se ve forzado a tomar la drástica decisión de tomarse el palo junto con los suyos.
Al otro día entonces, lleva a Bella al bosque y muy serio le dice “Estuve pensando en nosotros y tengo que decirte algo pebeta”.
“Mira si te sentís mal porque no me hiciste ni un regalito pedorro, siendo que tu familia está podrida en guita, no te preocupes. Yo no soy materialista. Y tampoco pienso que seas un flor de amarrete. Quedate tranquilo” responde Bella
“No, no es eso. Es algo mucho mas importante” dice Edward haciéndose el dramático.
“Ya se. No me digas nada. Te la comés ¿No? Bueno, ya algo me imaginaba. Sos demasiado pulcro y además se nota que te pintás los labios. Además hace bastante que estamos curtiendo y todavía no me tocaste ni una teta. Y bue, … No, si yo tengo una puntería para los tipos” dice Bella meneando la cabeza.
“No, no, nada que ver. No es eso. Además yo no me pinto los labios” responde Edward pasándose disimuladamente la mano por la boca “Dejame hablar ¿Queres? La cosa es que……. creo que lo nuestro no va mas piba” dice Edward sin que se le mueva un músculo de la cara “Por eso me voy del pueblo junto con mi familia”.
“¿¿Qué?? ¿Es por lo de la fiesta? Loco yo no tengo la culpa de ser apetitosa. Además me corté sin querer. No fue a propósito. Al final no te bancas una man. Yo te banco todo y vos a la primera te querés rajar. Me parece que estas exagerando. ¿Qué te pasa? ¿Ya no me querés mas?" le dice Bella con cara de circunstancia y el culo fruncido.
“Y …. No, la verdad que no. Ya fue. No sos vos, soy yo. Vos te mereces algo mejor. Yo no fui. Es lo mejor para los dos. Necesito espacio. Estoy confundido. Esto no es lo que parece. Mejor seamos amigos. Ea ea pepé. Se acabo, se finí, tufi memé” dice Edward intentando sin éxito lograr alguna expresión significativa con su rostro.
“Pe..pero ¿Vos me estás jodiendo?” gime Bella entre compungida y furiosa.
“No. Para nada. Es así. Lo único que antes de irme tengo que pedirte una cosa” dice Edward.
“Ah si claro. ¡El señorito encima tiene demandas! A ver ¿Que querés?” dice Bella cruzándose de brazos y moviendo la patita contra el suelo.
“Te pido por favor que me prometas que no vas a hacer ninguna locura” dice Edward haciéndose el romántico.
“¡¡AAAhhhh pero miralo vos la facha!! ¿Pero qué te pensas nene? ¿¿Que porque te vas y me colgás la galleta yo me voy a volver loca, voy a tener pesadillas, voy a ser mas amargada que de costumbre y que voy a andar haciendo cualquier cosa solo porque no soporto el dolor de perderte?? ¡Pero por favor! ¿¿A quien te comiste pibito??" dice Bella haciendo ademanes exagerados y sin poder disimular que ya está llorando como una boluda.
“Bueno, me alegro que nos entendamos. Hasta chau” dice Edward. Le da un beso en la frente y se va.
“¡¡Nonono!! ¡¡¡¡Vení para acá mampiro cagador!!!!" grita Bella que seguía sin hablar bien “¡¡No te vayás!!".
Pero ya es tarde. Edward desaparece como por arte de efectos especiales.
Bella, con el corazón roto y la chucha caliente, se echa a correr por el bosque intentando encontrar a su amado e inexpresivo inmortal, pero es en vano.
Finalmente, vencida por el cansancio, cae rendida al lado de un tronco y encima de una cagada de venado.
En un suspiro dice “Mampiro hijo de pu …" y se duerme, ahí mismo en medio del bosque.
A partir de ese día, Bella cae en un profundo estado de depresión.
Se vuelve mas huraña que de costumbre, no come, no duerme, no se baña, no se peina, y encima, tiene unas pesadillas terribles que hacen que se ponga a gritar como una desquiciada todas las noches.
Ante esta situación, su padre, que ya tenia las pelotas por el piso, la amenaza con mandarla a vivir con la loca de la madre, por lo que Bella, que no quiere abandonar el pueblo porque alberga la esperanza de que el ganso de Edward pueda llegar a volver, para evitarlo se hace la que está todo bien, que ya pasó, y para demostrarlo accede a salir a la noche con una de sus amigas.
Es en esa salida cuando, al enfrentar una situación riesgosa, Bella ve una imagen así medio fantasmagórica de su amado Edward que re vigilante le dice “Prometiste que no ibas a hacer locuras” antes de desvanecerse en el aire.
“¡Agarrame éssta vos, garca!” es lo primero que le surge decir a la joven, pero poco después, luego de barajar varias hipótesis y descartar que la aparición haya sido producto de los vinos que se había tomado antes de salir, se da cuenta de que el Edu se le aparece cada vez que ella está medio por mandarse una cagada que le sube a full la adrenalina.
“¡¡¡Uhhh estoy re loca!!!” se dice la joven a si misma pero, desesperada y alzada como está, no puede evitar empezar a buscar ponerse en situaciones de peligro, incluso aunque estas representen un riesgo para su vida, únicamente para satisfacer su gran deseo de sentir a Edward cerca suyo otra vez.
De entre todas las cosas que hace (después del curso de domadora de leones, el paseo por Fuerte Apache a las once de la noche, en tanga y agitando un billete de $100, y el arrojarse por las Cataratas del Iguazú adentro de un barril) es ir a Warnes y chorearse un par de motos medio hechas bolsa de un desarmadero, para pedirle luego a su viejo amigo indio Jacob (que está mas grande y se ve que se estuvo papeando de lo lindo), que la ayude a arreglarlas para después salir a hacer willys por ahí.
Esto hace muy feliz a Jacob que, como quedó claro en la película anterior, está mas que caliente con Bella y no ve el momento de poder darse el gusto de pegarle unas buenas sacudidas.
Gracias a esta nueva tarea, la relación entre ellos se vuelve aún mas estrecha, y Jacob pasa a ser un gran consuelo para Bella (sobre todo porque cuando lo vió en cueros casi se le incendia la chuchi de la calentura que le agarró, al igual que a todas las espectadoras de la sala), ayudándola a recuperar poco a poco la normalidad de su vida.
Lo que la joven aún no sabe es que el bueno de Jacob, así como se lo ve con esa carita de nene, lleva en su sangre el gen de la licantropía, el cual, llegado el momento, lo forzará a juntarse con otros como él para convertirse en una manda de enormes y sanguinarios lobos cuya misión es la de destruir a los vampiros que, rompiendo el pacto sellado por ambas especies hace siglos, intenten lastimar a algún ser humano.
No obstante, y a pesar de esta incipiente nueva relación semi romántica con Jacob, Bella continúa obsesionada con percibir la imagen de Edward, por lo que en una de sus locas búsquedas de adrenalina, no tiene mejor idea que mandarse un clavado al río desde un acantilado.
Este suceso, provoca que Alice (la cuñada vampiro), reciba a la distancia la visión (porque es algo así como una vidente. También es astróloga y por $20 te tira las cartas) de que Bella ha decidido suicidarse (se ve que, como vidente, la vampiro es bastante poco confiabe) y en lugar de callarse la boca, va y se lo cuenta a Edward.
El muchacho entonces se pone como loco, y luego de golpearse repetidamente su escuálido pechito de púber lampiño al grito de “¡Es por mi culpa! ¡Por mi culpa! ¡Por mi gran culpa!” toma la radical decisión de terminar con su vida él también.
Para esto, no va a clavarse una estaca en el corazón o sentarse sobre ella, ni a comerse una ristra de ajo, ni a ponerse al rayo del sol (además estos vampiros no se mueren si se exponen al sol sino que brillan. No pueden ser mas gay), sino que lo hará entregándose a los Volturi, una especie de realeza ancestral, poderosa y bastante afeminada de la raza de los vampiros, que condenan a muerte a cualquiera de ellos que se exponga en público, ya que el romper su anonimato, hace peligrar la existencia misma de su especie.
Ante esta situación, Alice decide volver al condado de Forks para cerciorarse de que lo que vió en su visión es correcto, pero al llegar se da cuenta de que la pifió feo ya que Bella está ahí en la casa lo mas campante.
Allí entonces le cuenta a Bella lo que Edward está a punto de hacer, por lo que la joven debe decidir entre dejar todo atrás y arriesgarlo todo, incluso su entrañable y casi romántica relación con el pobre de Jacob (que otra vez se queda sin ponerla) para intentar llegar hasta su amado a tiempo y evitar así que cumpla con su fatal destino, o seguir como está y arriesgarse a ser la mamá de una camada de adorables y sanguinarios lobitos.


La película no presenta demasiados cambios con respecto a lo que fue la anterior, y sigue siendo un producto pensado casi exclusivamente para ese público adolescente y mayoritariamente femenino que aún cree en los cuentos de hadas y el amor trágico.
El guión sigue siendo predecible, empalagoso y cursi, lleno de frases relamidas puestas ahí para que al ser pronunciadas por el grasa del protagonista todas las espectadoras pelotudas hagan “Aaahhhhhhhhhh” (cosa que hicieron en cada oportunidad, aunque cueste creerlo).
El ritmo de los acontecimientos es lento, y por momentos se hace demasiado denso, lo cual, al final, da la sensación de que todo es innecesariamente mas largo de lo que parece.
Los momentos de acción son escasos y no aportan nada destacable, producto esto quizás de la mediocre factura de unos efectos especiales que realmente no muestran nada que no se haya visto antes y de una banda sonora que no se esmera en salir de lo habitual.
Una vez mas, al igual que en la anterior, los ribetes sobrenaturales de la historia (quizás lo único interesante del asunto) se ven tristemente desperdiciados con licencias completamente arbitrarias (una vez mas los vampiros brillantina, pero ahora acompañados por los hombres lobo de conversión automática), desaprovechando así el único punto relevante que podría tener esta producción y restándole, además, una cierta cuota de realismo que hubiera sido realmente muy bienvenida.
En cuanto a las actuaciones, se repite el elenco de la primer parte casi en su totalidad.
La pareja protagónica está compuesta por Kristen Stewart como la afligida Bella Swan, que a pesar de que por momentos muestra cierta exageración en los gestos, logra un trabajo convincente; y el siempre inexpresivo Robert Pasttinson como Edward Cullen, el vampiro con tránsito lento, que sigue demostrando que actúa con la gracia de una ojota y la ductilidad de un ladrillo.
Junto a ellos están Taylor Lautner como el indio patova Jacob Black, cuya labor opaca la mayor parte del tiempo a la de Pattinson (además el pibe se la bancó como machito y para sacar abdominales se mató en el gimnasio. No como el otro maraca, que se los tuvieron que pintar), Ashley Greene como Alice Cullen, Peter Facinelli como el Dr. Carlisle Cullen, Dakota Fanning como Jane (que supongo que por lo que dura su participación, debe estar debiendo algunas cuotas de algo y necesitaba unos mangos), Michael Sheen como Aro, y todos los otros.
La película fue dirigida por Chris Weitz quien cuenta en su haber con trabajos tales como “American Pie: La boda” y “La brújula dorada” y que en este caso hizo lo que pudo con una historia que sigue siendo demasiado pretenciosa para lo que termina ofreciendo.

Calificación: 2 Renegados y medio (Regular. La continuación de esta marketinera y edulcorada historia de amor sobrenatural que, al igual que la anterior, insinúa mas de lo que ofrece. Un guión pobre y unas actuaciones poco destacables, en un producto destinado ciento por ciento al público femenino adolescente).

Recomendaciones: Si Ud. es una romántica incurable y todavía sueña con encontrar a su príncipe azul, vaya a ver esta película que seguro le va a encantar.
Si Ud. es hombre y va para acompañar a su mujer, novia, amiga y/o amante, primero, que por ahí se aburre, y segundo, créame que se va a hacer mucha mala sangre cuando aparezca el indio en cueros y vea a su acompañante atragantarse con su propia baba.
Si Ud. es una de las espectadoras que cuando el mamerto de Edward dice la frase cursi esa de “Solo con respirar me das todo lo que necesito” o algo así, hace “Aaaaaahhhhhhhhhhhhhhhh” en voz alta, déjeme decirle es es Ud. una pelotuda.
Si Ud. es la señorita que estaba sentada detrás mío, y que cuando Bella y el indio se estban por besar decía “¡No no no no no!” también en voz alta, déjeme decirle que es Ud. mucho mas pelotuda que las anteriores.

martes, 24 de noviembre de 2009

Si la mentira tiene patas cortas, este camina con la cintura

Basándonos en las recientes declaraciones del impresentable Jefe de Gabinete, mitómano patológico, y defensor de lo indefendible, Aníbal Fernández, con relación a la aparición de un video y fotografías que prueban la presencia del, según sus propias palabras, “mequetrefe de alquiler”, el venezolano Guido Antonini Wilson en la Casa Rosada, apenas dos días después de intentar ingresar ilegalmente al país una valija con 800.000 dólares de dudosa procedencia, y teniendo en cuenta que, aún a pesar de que las pruebas son evidentes el tipo insiste en que “habría que ver si el video es verdadero” o “no me consta de que el de la imagen sea Antonini”, el Departamento de Investigaciones Futuristas de Esquivando el Éxito, está en condiciones de adelantar, en exclusiva, cuales serán las próximas afirmaciones de este repugnante personaje:


“La gestión de la Presidenta Fernández de Kirchner es absolutamente transparente. En conjunto con la anterior gestión del ex Presidente Néstor Kirchner, han conformado los dos gobiernos mas honestos de la historia argentina. Cualquiera que diga lo contrario está faltando a la verdad y está diciendo estupideces. Todos los rumores de sobreprecios en la obra pública, compra de voluntades, robos descarados, manejo de la justicia, fraudes y corrupción flagrante, no son mas que viles operaciones impulsadas por sectores opositores y el grupo Clarín, en un afán desesperado por detener el imparable crecimiento que estamos llevando adelante. ¡¡Por favor infórmense bien antes de hablar!!”.


"La belleza de la Presidenta Cristina Kirchner es absolutamente natural. Cualquiera que insinúe lo contrario está diciendo paparruchadas. La Sra. Presidenta jamás se realizó una aplicación de bótox, ni un estiramiento de piel, ni se aplica extensiones de cabello. Si hasta apenas se maquilla. ¡¡Pero por favor!! Dejen de atacar gratuitamente con argumentos que no resisten el menor análisis y hacerle el juego al grupo Clarín".


"¡En el país no hay inseguridad! ¡Por favor! ¿Quién le dijo eso? Miren, estamos viviendo en un oasis de tranqulidad como nunca se vivió en la Argentina señores. Dejen de reclamar por reclamar. Hoy se puede salir a la calle a cualquier hora con absoluta normalidad y sabiendo que se está se gu ro. Les pido que no se hagan eco de las falacias propagadas por aquellos que pretenden sembrar el miedo, como el grupo Clarín. Yo les aseguro que la Argentina es el país mas seguro de la Tierra, y eso se lo puede confirmar cualquiera”.


“El Sol, no es es centro del sistema solar. Eso es una paparruchada lanzada por el grupo Clarín y la Nasa que son organizaciones funcionales al Imperio. El Sol gira alrededor de la Tierra y esto es un hecho. ¡¡Por favor dejen de inventar afirmaciones que confunden a la gente!! ¿Galileo? ¿¿Pero quien es Galileo?? El Sr.Galileo nunca trabajó y no tiene autoridad moral para hablar de estas cosas ¡¡Por favor!! ¡¡Seamos serios!!”.


"No, el Pato Donald NO es un pato. Eso es una falacia y una estupidez. Esas son versiones del grupo Clarín que buscan desviar la atención de los temas que realmente le importan a la gente. El pato es el perro Pluto y basta señores. Dejen de buscar contradicciones donde no las hay. ¿Walt Disney? ¿Quién lo conoce a Walt Disney? ¿Quién es? ¿Que hizo? ¿Con que autoridad opina de estos temas? ¡¡Pero por favor!!”.


"Yo no tengo bigote. ¿Quien le dijo eso? ¿De donde sacan esas cosas? ¡¡Pero por favor!! Eso es ridículo. Basta de inventar cosas y de tratar de desestabilizar. Esas versiones del grupo Clarín únicamente pretenden desviar la atención pública de los temas que los involucran directamente y así atacar a aquellos que integramos el mejor gobierno de la historia de la humanidad. Yo les aseguro, señores, sin temor a equivocarme y con total confianza en lo que digo, que eso de que yo tengo bigote es completa y absolutamente falso”.



Seguiremos informando (si no nos morimos del asco).

viernes, 20 de noviembre de 2009

Hoy no hay pregunta...

Si, no lloren.

Yo se que les encanta esto de responder a las preguntas de los viernes.
Les apasiona. Esperan toda la semana con impaciencia, mordiéndose los codos, caminando de un lado a otro como leones enjaulados, esperando el sagrado momento en que el interrogante aparece publicado, para por fin poder arrojarse violentamente sobre sus teclados en un afán de ser los primeros en responder y así, como siempre, sentirse partícipes de este sitio al que tanto aman.

Estoy conciente de todo eso. En serio. Lo vivo cada vez que se me ocurre revisar las estadísticas y veo la cantidad de visitas, y, claro, sobre todo, lo noto en la cantidad de comentarios.
Es obvio que comentar acá es algo que está entre las cinco prioridades principales de sus vidas.

Pero bueno, hoy vamos a tener que dejar eso un poquito de lado.

Esta vez, a falta de preguntas, les traigo, nada mas y nada menos que sabiduría.

Lo que sucede es que hoy, mientras venía hacia el trabajo, al ver una imagen, una simple imagen, tuve un momento de lucidez pura, una epifanía, una revelación, y no puedo no compartirla con ustedes (Los sabios iluminados somos así. Es como una obligación que tenemos para con las personas normales. O "duritos" como les decimos cariñosamente).

Solo espero que sus mentes estén lo suficientemente preparadas como para recibir la claridad suprema de esta afirmación.

Ahí va:

El salchichón se llama así porque parece una salchicha muy grande.


Nada mas.

Tómense unos segundos para recuperarse y luego vuelvan a sus vidas normalmente. Si pueden.

Que tengan un revelador fin de semana.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Parece mentira...

Pero jodiendo jodiendo, así casi sin querer y contra todos los pronósticos, en el día de la fecha, este humilde e ignoto sitio, este casi desconocido rincón del universo virtual, este insignificante espacio de escasa convocatoria y aún mas escaso éxito, está cumpliendo su tercer año de existencia.

Si. Tres años ya.

Quien lo diría.

Tres largos años.

En fin ...

No hay mucho mas para decir.

Simplemente muchísimas gracias a todos los que durante estos años se han tomado la molestia de dedicar unos minutos de su valioso tiempo para pasar por aquí y leer las boludeces que escribo.

De verdad... Gracias.

viernes, 13 de noviembre de 2009

Pregunta hipotética que no pretende hacer apología de nada y que conste en actas

Hay momentos (generalmente cuando estoy medio al gas y aburrido), en los que se me da por imaginar situaciones medio retorcidas que suelen terminar con una pregunta que, en un primer momento parece tener una respuesta no demasiado complicada, pero que, luego, a medida que se va meditando, es como que se le encuentra alguna vuelta que hace que al final no me quede tan seguro de mi respuesta.

¿Se entiende? ¿No?

Bueno, paso a desarrollar un ejemplo par ver si son capaces de responder, o si realmente estas cosas se me ocurren solo a mi y ya va siendo tiempo de que me preocupe y empiece a hacer terapia.

La cosa sería así:

Ponele que un día cualquiera, se te aparece Dios (es un suponer, no creo que Dios ande haciendo estas cosas pero estamos suponiendo) y te dice "¡¡Felicitaciones miserable mortal!! Hicimos un sorteo en las dimensiones superiores y resultaste ser el feliz ganador del premio "Date el gusto que yo miro para otro lado", el cual consiste en lo siguiente:..."
Ahí Dios se corre un poco la túnica (digo yo, supongo que debe usar túnica. No me lo imagino con jeans o una bermuda floreada. Aunque es Dios. ÉL podría usar cualquier cosa. Bueno, no se ...) y saca tres sobres y los despliega en forma de abanico.
"Acá tengo tres sobres" dice Dios "Cada uno de ellos contiene un deseo que tu debes elegir y yo te concederé libre de toda culpa. O sea, te sale gratis. Cualquiera que elijas, lo hacés realidad y no va a tu legajo (si, porque allá tenés un legajo, sabelo)".
"Pero hay algo mas" continúa diciendo Dios con ademanes de conductor de programa de juegos "No tendrás que adivinar el contenido de los sobres. YO te los voy a decir. Y una vez que los conozcas podrás optar por elegir uno de ellos o ninguno. La decisión será únicamente tuya. y recuerda, miserable y querido hijo, que YO no te voy a juzgar por esta vez. ¿Se entiende o te hago un dibujo?".

"Entiendo" responden ustedes (porque quisiera creer que está bastante claro como es el asunto. Sino, bueno, lean de nuevo. Que se yo. Yo no soy su maestro, tutor o encargado).

"¡Fantástico!" dice Dios entusiasmado "Prestá atención:..."

El sobre número 1 contiene 24 horas de lujuria con la o las personas que elijas. Cualquier persona de cualquier sexo, para cumplir todas tus fantasías (incluso esas que jamás vas a confesar y que YO conozco porque YO lo se todo, degenerado).
Eso si, este deseo no tiene garantía de confidencialidad. Esto quiere decir que, una vez consumado, si a MI se me ocurre, agarro y hago que todo el mundo se entere de lo que hiciste, con quien y como. Incluso esas personas que no te gustaría que lo supieran.

El sobre número 2 te permite viajar atrás en el tiempo y realizar un cambio en tu vida. Cualquiera. El que elijas. Pero solo uno.
Eso si, no existe ninguna garantía de que esa modificación logre que, al regresar, tu vida sea mejor. Incluso existe el riesgo cierto de que, por el contrario, hagas que todo sea mucho peor, ya que es imposible preveer las consecuencias que ocasione ese cambio.
Además, una vez realizado, el resultado será inmodificable, es decir que, aunque te arrepientas, nunca jamás podrás volver a tu antigua vida.

Por último, el sobre número 3 te ofrece la posibilidad de asesinar a una persona. Solo una, pero cualquiera que elijas y de la forma que prefieras, garantizándote que nadie jamás sabrá tu identidad.
Eso si, nunca podrás olvidar lo que hiciste mientras vivas.

Y eso es todo. Ahora la elección es tuya" concluye Dios mientras flamea los sobres arqueando las cejas.

Entonces, obviamente, la pregunta en cuestión es:


¿Que sobre elijirían?

Por supuesto que la respuesta debe ir acompañada de los detalles del caso. Sino no vale.

Y no es que quiera meterles presión, pero Dios lee este blog y los está mirando.
Me dijo que si no responden ya van a ver.

No se. Yo digo lo que me dijo nomás.

Ahí se los dejo. Buen fin de semana.

martes, 10 de noviembre de 2009

Hambre de sábado por la noche

El sábado fue un día bastante… a ver …. como podría decirlo par que no suene mal ….. choto. Ahí está: choto.

Para empezar, no pude asistir a un gran evento al que estaba invitado.
Un evento que, sin exagerar, podría calificarse de histórico; un evento de una magnitud y una trascendencia tal, que difícilmente pueda definirse con palabras, y, lo que es peor, un evento en el que había comida, detalle fundamental que hizo que mi angustia fuera aún peor y anduviera con el ánimo mas o menos al nivel de los callos durante buena parte de la jornada.
A pesar de ello, sin embargo, y haciendo gala de una entereza que solo los hombres como yo poseemos (hombres muy muy hombres, casi salvajes, primitivamente masculinos diría), en lugar de quedarme llorando en casa decidí aprovechar el tiempo y liquidar algunos asuntos que tenía pendientes.
Por eso, luego de evaluar mis prioridades, me decidí por lo mas urgente y agarré y me fui a la peluquería para arreglarme un poco las chuzas, porque ya tenía el marote como un nido de caranchos y me estaba volviendo loca.
Por desgracia, mi coiffeur o no estaba en uno de sus días mas inspirados o no entendió muy bien mi precisas instrucciones porque me cortó … a ver, como lo digo para que quede bien y no decir choto de nuevo y quedar como un ordinario….. bueno, me cortó como el ojete, lo cual, en un tipo con un atractivo físico tan imponente como el mío, equivale directamente a cometer una herejía.
Gracias a eso, ahora y hasta que la naturaleza haga su trabajo, debo tolerar ir por la vida con un corte de pelo que me deja simplemente muy lindo, en lugar de ser arrolladoramente hermoso como estoy acostumbrado.

La verdad, un horror.

Así y todo, y como no soy de los que escarmientan fácil, esto no me detuvo y, decidido a salvar el día, llegada la noche no se me ocurrió mejor idea que proponerle a mi mujer de ir a pasear a la Feria de las Colectividades, un evento que se realiza todos los años por estas fechas y que, afortunadamente, se hace en una plaza que queda a cinco cuadras de mi casa.
Lo lindo de esa Feria (bah, lindo … lo único interesante) no es precisamente el hecho de que haya artesanías ni gente disfrazada con trajes típicos (eso es para las viejas), sino que cuenta con sendos stands con comidas y bebidas típicas de cada región y/o/u país, lo cual es una de las cosas que mas me gusta poder disfrutar (De hecho si alguien me diera a elegir el trabajo de mis sueños, este sería algo parecido a lo que hace Anthony Bourdain en su programa “Sin reservas” – Canal Travel & Living – Miércoles a las 23:00 hs.).
Morocho brasilero preparador de tragos. Por un momento me sentí en Canasvieiras.

Claro que este sencillo plan contaba con un pequeño error de cálculo. Un detalle fundamental que se me pasó por alto (seguramente porque el mal corte de pelo me alteró la frecuencia de pensamiento): la gente.
No se si alguna vez lo dije, pero una de las cosas que mas me molestan y que de peor humor me ponen en el mundo son las muchedumbres. Y mucho peor si son muchedumbres así medio empelotudecidas de gente caminando despacio sin mirar por donde va, porque está embobada mirando para cualquier lado.
Obviamente era consciente de que en una Feria así iba a haber gente pero, sinceramente, no se me ocurrió pensar que habría tal cantidad.

Caminar entre los stands resultaba poco menos que insoportable.
Detenerse en alguno de ellos intentando degustar algún plato, directamente imposible.

Luego de dar un par de vueltas de reconocimiento (vueltas en las que con mi mujer fuimos sistemáticamente empujados y pisados mas veces de las que pudimos contar), y viendo que ya eran pasadas las nueve y media de la noche y el hambre comenzaba a pasar factura (porque encima fuimos sin cenar para comer ahí. Somos re locos) nos dispusimos a encarar la horrenda tarea de intentar conseguir algo para comer.
Pero no. No se podía.
En cada stand mas o menos piola, tipo el de México (en el que preparaban unos tacos que se veían increíbles), el de Irlanda (que tenía enormes chopps de cerveza negra tirada), el de Alemania (donde ofrecían unas enormes salchichas con chucrut) o el de Siria (con su clásico shawarma), había colas de no menos de treinta personas (la mitad de ellas, por supuesto, compuestas por viejas rompebolas y gente con cara de “¿A ver que hay acá?”) lo cual daba un tiempo de espera que, sin exagerar, no bajaba de los veinte minutos.
Y si hay algo que odio mas que a las muchedumbres, es tener que esperar en medio de una muchedumbre. Y encima para comer.
Luego de varios infructuosos intentos, mi mujer decidió probar suerte por su cuenta en el stand de Italia y ver si podía conseguir una pizza, cosa que logró luego de mas o menos diez o quince minutos gracias a su determinación y, especialmente, a que cuando le da hambre se pone mas caprichosa que de costumbre.
Lo interesante del caso fue que lo único italiano de la pizza (una individual bastante piojosa) era la bandera que adornaba el stand, porque por lo demás era de lo mas ordinaria (Encima lo mas “italiano” que hacía el que la preparaba era ponerle un condimento arriba del queso y luego rociarla con aceite de oliva, cosa que mi mujer le pidió que no hiciera porque, según sus palabras “Andá a saber que es eso que le pone, capaz que es picante y no me gusta”).
Yo, a esa altura, entre que no podía comer lo que quería, y ya estaba podrido de caminar entre tanta gente, me iba poniendo cada vez de peor humor, así que antes de encularme del todo y empezar a romper cosas o pegarle un voleo la próxima vieja que me chocara me armé de paciencia, fui al stand de Brasil, esperé, esperé, y me compré una caipirinha (porque no me pensaba ir sin tomarme aunque sea una).

Otro morocho brasilero preparador de tragos preparando mi caipirinha, cosa que hacía sin dejar de bailar al ritmo del samba. Esta es una de las varias fotos que le sacó mi mujer. No se por qué tantas si con una alcanzaba.

Y esa fue mi única satisfacción de la noche.

Por lo demás, fui con toda la ilusión de atiborrarme de comidas regionales, y lo único que terminé comiendo fue un “exótico” choripán. (Bueno, en realidad uno y cuarto, porque cuando estaba esperando en la fila para comprarlo mi mujer me dijo que comprara dos porque solo había comido un pedacito de la pizza que se compró ella y con uno seguro me quedaba con hambre, así que le hice caso, me compré dos y le di uno a ella para que me lo tenga mientras yo daba cuenta del primero. Ella lo mira, le da un mordisquito y luego de decir “Uh que bueno que está esto” ese supuesto segundo choripán destinado a que yo no me quedara con hambre comenzó a desaparecer lentamente entre sus manos hasta quedar reducido a tan solo unos pocos centímetros).

Parrilla de comida exótica. Los lugareños lo llaman "chorizo" y lo comen cortado al medio en forma longitudinal y dispuesto entre dos piezas de pan. Esto se denomina "choripan". Yo lo probé y es muy bueno.

Luego de eso, con mas hambre que satisfacción (al menos en mi caso) vimos un ratito un recital de música celta y, como la cosa ya no daba para mas y cada vez parecía haber mas gente, nos fuimos a casa.

Vista del escenario durante el recital de la banda que tocaba musica celta. Estuvieron bastante bien, lástima que no me acuerdo como se llamaban.
El ambiente era muy familiar, como se puede apreciar por los dos jovatos haciéndose los acaramelados de la foto.

En conclusión, la Feria está muy bien. Cada año la ponen un poco mejor, se ve que hay esfuerzo, todo muy lindo, todo muy vistoso, todo muy familiar, pero yo me fui re caliente y con hambre

Y la gente, como siempre, lo arruina todo.
Parece que no entienden que cuando llego yo deben abrirme paso como si fuera Moisés ante el Mar Rojo. No entiendo. No es tan difícil.

Pero bueno, igual el año que viene pienso volver, porque me quedaron varias cuentas gastronómicas pendientes y no lo pienso dejar así.

Y lo voy avisando desde ahora: Voy a ir y voy a darme el gusto de comer todo lo que quiera, aunque tenga que ir armado con un palo para abrirme espacio.

Así que ya lo saben. Córranse.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Post con fotos XXX

No. Mentira. No hay ninguna foto. Pero bien que entraron enseguida ¿Eh degeneraditos?

Bien, ahora a lo nuestro.

En primer lugar, hago acto de presencia solo para llevarles tranquilidad y sosiego ante la ola de mails y mensajes recibidos preguntando el por qué de mi “virtual desaparición” durante estos días. Realmente, tamaña demostración de afecto realmente me emociona hasta las lágrimas.

Obviamente estoy siendo irónico, por si no se dieron cuenta.

Es evidente que a mi me puede caer un rayo, me puedo caer a un pozo ciego, o me puede abducir un plato volador, que a nadie se le movería una pestaña.
Seguro que incluso hasta pasarían por acá y al ver que no hay nada nuevo arrugarían la nariz, menearían la cabeza y diría con tonito de desprecio “Como se rasca este tipo. Está bien que lo que escribe es rayano con la pelotudez mas extrema, pero estoy tan al pedo que necesito leer algo. Aunque sea eso. Y este no escribe. Es una falta de consideración hacia mi, que soy el publico”.

Claro. Porque no importa que yo estuviera accidentado y viviendo con un dolor casi inhumano. Lo importante es que trabaje para su entretenimiento ¿No?

Si, estuve accidentado.

¿Cómo? ¿No lo sabían? Y claro, si no se preocupan en preguntar.

Yo podría haber estado debatiéndome entre la vida y la muerte, sintiendo el frío roce del sueño eterno, viendo la luz al final del túnel, a punto de caer en las profundidades del Hades, y acá … nada. Nada. Solo silencio e indiferencia.

Decí que lo que me pasó solamente fue que me esguincé el codo en el colectivo, que sino…

No es para reírse. Fue un esguince con desgarro muscular y todo.
Y encima en el brazo derecho que, como saben aquellos que algo me conocen, es mi brazo hábil (soy zurdo solo para escribir, agarrar el cuchillo y abrir frascos).
Estuve como una semana con un dolor mas que importante y prácticamente sin poder mover el brazo, situación ésta que me generó no pocos inconvenientes, como por ejemplo el vivir con media cabeza peinada y media no, o el casi suicidarme en varias ocasiones intentando cepillarme los dientes con la mano izquierda.

Pero bueno, afortunadamente ya pasó lo peor y ahora, aunque aún tengo algo de dolor, ya estoy bien y solo me queda un hematoma y un codo un poco mas “puntudo” de lo normal que, supongo, se irá acomodando con el tiempo.

Dicho sea de paso, así y todo, con dolor y demás, aunque no haya actualizado este sitio, igual cumplí con mi artículo de MIB, el cual está en este preciso instante disponible para ser leído (Pueden acceder a él haciendo click en el banner de la barra lateral. Creo. Estoy casi seguro que es así).
Lo traigo a colación porque aparentemente no han comprendido como es la cosa (quiero creer que es así y no que son realmente unas personas muy miserables que no quieren colaborar conmigo y se regocijan en mi fracaso).
Por las duds les explico de nuevo: para que a mi, persona encantadora si las hay, en algún momento le toque una monedita, el sitio debe llenarse de visitas ¿Se entiende? LLE NAR SE.
Así que, ya mismo, los intimo a que visiten el sitio, de ser posible dejando constancia de que van por mi, porque no se si la repartija va a ser a comisión o no.

Y eso es todo por hoy …


Ah, claro, hoy es viernes. Debería dejar la pregunta.

Que cagada che, no tengo nada preparado.

Bueno, te sacio una así de la galera. Porque yo uso galera. Algunos dicen que soy excéntrico. Otros que soy un reverendo pelotudo. En fin … A ver …

Ahí va:

¿Existen las casualidades o todo lo que pasa, indefectiblemente, está interrelacionado y tiene un significado que se revela con el tiempo? ¿Eh?

Faaaaaaaaaa … Y eso que la tiré así de sobrepique nomás.

No hay caso. Cuando uno es talentoso es talentoso.


Buen fin de semana chichipíos.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Aclaración importante

Se que muchos, sino todos, los que vieron este titular, de inmediato y antes de leer la nota, deben haber saltado de alegría, o llorado hasta las lágrimas, o las dos cosas juntas (lo cual habla de lo mal que están) pero lamento informarles que no se trata de mi.

Repito: no soy yo el protagonista (Aunque bien podría serlo. La verdad que no sé que tiene el tipo ese que no tenga yo).

Bueno, eso es todo.

Solo quería confirmarles eso para que no se hagan ilusiones en vano (por las dudas de que, aún después de leer la nota, sus incontenibles ansias de saber de mi les hagan pensar que se trata de un error de redacción y sigan ilusionados con que el programa en realidad es acerca de mi persona. No. Aceptenlón. No es sobre mi.).

Lamento su, seguramente, profundísima decepción.

Que se le va a hacer.

viernes, 16 de octubre de 2009

Pregunta con gustito

Alguna vez, en alguna reunión que ahora no recuerdo bien (no se si fue en la Embajada de Austria o en una cena de gala en algún Consulado) me encontraba yo manteniendo una muy interesante conversación con otros invitados (todo ellos de la mas alta y refinada alcurnia por supuesto) acerca de los gustos gastronómicos predominantes en las distintas partes del mundo, de las distintas influencias que esto ha tenido en las cocinas autóctonas de cada cultura y de cómo la llamada “cocina fusión” se ha popularizado a tal punto, que hoy en día es de lo mas “in” que se puede encontrar en los restós de la mas alta categoría en las principales capitales culinarias del mundo.

En un momento, cuando la conversación fue desviándose hacia los gustos personales de cada uno de los integrantes, yo, elevando mi ceja derecha y sin dejar de revolver delicadamente el hielo de mi whisky con el dedo índice, expresé abiertamente mi agrado por el regusto del Big Mac de Mac Donald’s.

“Discúlpeme pero no le sigo. Le ruego me conceda el favor de explicarme eso” me dice el Embajador de Marruecos, luego de esbozar una sonrisita nerviosa pero sumamente respetuosa, mientras el resto de los interlocutores me observaban en silencio.

“Con mucho gusto Embaja” le respondo mientras me chupo el whisky que humedece mi dedo “A mi me gusta mucho el Big Mac ¿Vio? Es esa hamburguesa doble que es como la “hamburguesa insignia” de Mac Donald’s. Le aclaro por si no suele ir a comer a este sitio con frecuencia”.

“No, la verdad que no suelo” me dice el morocho.

“Bueno, verá...” continúo yo mientras me mando un canapé de langostinos de un solo bocado “El Big Mac tiene pepino, generalmente tres rodajitas para ser mas preciso, y es una de las cosas que le brinda al contenido del emparedado su característico sabor. Pero hete aquí que el pepino, además , al menos en mi caso particular, ocasiona que lo repita durante horas. Y no es que vaya por la vida diciendo “pepino pepino” eh. A lo que me refiero, para ser mas explícito, es a que lo eructo varias veces en las horas siguientes a haber consumido dicho producto”.

“Aja” murmura el Embajador con una mueca de extrañeza en el rostro, mientras la esposa del Cónsul de Mónaco, que se disponía a comer un bocadito de camarones, se arrepiente y lo deposita en una servilleta.

“A lo que me refería la primera vez, es a que a mi me gusta mucho saborear este eructo saborizado por los pepinos, porque me proporciona como un revival del Big Mac que me acabo de comer e incluso, a veces, hasta logra que me vuelva a dar hambre y todo ¿Se entiende?" finalizo yo mientras me escarbo los dientes con el sablecito de plástico que traía el canapé.

El Embajador arruga la nariz sin decir una palabra, mientras la esposa del Cónsul de Mónaco se cubre los labios con una mano mientras hace una pequeña arcada.

El resto de los invitados me mira con una mezcla de asombro y repugnancia y se empiezan a alejar de mi lentamente.

Yo me termino el whisky, hago un par de buches, y me alejo masticando el cubito de hielo.


Esta pequeña y sabrosa anécdota, es solo a título de introducción, solo para dar lugar a la simpática pregunta de la semana que es:

¿Qué costumbre, característica, o gusto personal tienen ustedes que pueda ser considerado, quizás, como desagradable o de mal gusto por el resto del mundo?

Pueden ser completamente honestos. Acá nadie los va a juzgar.

Nadie les va a decir que son uno cerdos sucios y asquerosos, y unos seres tan repugnantes que deberían irse a vivir a una cueva en una montaña perdida en el medio de una isla desierta.

Ni siquiera yo, que soy un tipo refinado como pocos.

Buen fin de semana.



Aviso parroquial: El día lunes próximo estaré publicando en MIB.
A ver si se ponen las pilas y se dignan a pasar eh. ¿O acaso tengo que recordarles que para que me llegue a tocar una moneda debemos juntar muchísimas visitas regularmente?
No quisiera pensar que son todos una manga de egoístas tan grandes que no quieren que una persona tan adorable como yo haga realidad su sueño de vivir sin trabajar.

Por eso, una vez mas, los invito por las buenas.

(La proxima vez no voy a ser tan amigable. No me obliguen a utilizar métodos que no quiero emplear).

miércoles, 7 de octubre de 2009

Crítica de cine: DIABOLICA TENTACIÓN

Si hubiera que resumir esta película en dos palabras, estas serían “¡¡Que buena que está Megan Fox por el amor de Dios!!".
Si, son mas de dos palabras, ya se, pero no importa, así como tampoco importa mucho el resto porque, evidentemente, esta es una película que fue ideada y producida únicamente para aprovechar el gran momento de popularidad que está atravesando la morocha protagonista de “Transformers” y explotar al máximo su increíble (In cre í ble) sensualidad.
Por lo demás, no hay mucho mas para agregar.
“Diabólica tentación” es un típico filme de terror hecho casi exclusivamente para un público adolescente, de esos en los que las situaciones se suceden casi porque si, la sangre sobra por todos lados, y el argumento cae en absolutamente todos los lugares comunes del género y está plagado de pretendidos toques de ironía o humor que, por momentos, rozan el ridículo.

Sinosip

En el tranquilo y alejado pueblito llamado “La caldera del Diablo” (que se llama así por una misteriosa cascada en la que el agua cae a un pozo aparentemente sin fondo y que, junto con el toro de tres pelotas, conforma uno de los atractivos turísticos del lugar) las vidas de sus habitantes transcurren normalmente entre la monotonía y el aburrimiento, mientras que los jóvenes viven preocupándose únicamente por esas pelotudeces que siempre suelen preocupar a los típicos adolescentes de preparatoria que vemos en absolutamente todas las películas americanas, o sea, quien es popular y quien no.
Needy Lesnicky, es una de esas no populares. Es responsable, estudiosa, quedada, y, a pesar de que es medio bagre y casi todo el mundo la ignora (mas que nada por el detalle de que es medio bagre) se enganchó con un flaquito flequilludo bastante bobina llamado Chipp, y ahí anda noviando y teniendo una alegría cada tanto.
Pero mas allá de eso, además, cuenta con la particularidad de tener un poco de chapa prestada, ya que mantiene una estrecha, íntima y muy especial amistad con su mejor amiga de toda la vida, la bellísima, infartante, medio tarada y bastante trola Jennifer Check, la líder de las porristas del colegio y, por ende, la pebeta mas popular del arrabal y esa a la que todos le quieren sacudir las cascarrias.
Así, Needy y Jennifer son lo que se conoce como “B.F.F.” o “Best Friends Forever” (Mejores Amigas para siempre, o lo que acá se traduciría como “Están a un paso de hacer la tijereta”), y de hecho son tan íntimas que, incluso, por alguna causa que nadie se molesta en explicar, Needy siempre puede presentir cosas sobre Jennifer (Lo cual, en el pueblo, dio motivos para que las malas lenguas anden comentando que son medio papa y huevo, pero bueno, en los pueblos son así, chusmas y mal pensados).
Todo venía así de aburrido hasta que, un buen día, la muchachada se revoluciona ante la noticia de que una banda de rock de cierta fama venía a tocar a ese pueblo de porquería.
Al enterarse de esto, Jennifer, que siempre andaba caliente, le dice a Needy que se olvide de hacer planes con el pescado del novio para la noche, porque la tiene que acompañar al club donde iba a ser el recital.
La gansa de Needy obviamente acepta (las amigas feas siempre hacen lo que la linda dice. Generalmente además de feas también son medio boludas) y esa misma noche las dos terminan en una especie de cantina medio perdida en el medio de la nada, que de club tenía muy poco.
De todas formas, ni bien aparecen los miembros de la banda, Jennifer, que era mas fácil que la tabla del uno, se le va al humo al cantante y le empieza a buscar conversación y a histeriquearlo abiertamente.
“¡Que hacé papi! ¿Como te va lindo? ¿Te vas de viaje? No, por el bulto digo” le dice regaladísima.
Mientras tanto, la pobre Needy, que tenía menos onda que una bandera de chapa y, además, de ninguna manera iba a engañar a su noviecito, se quedaba ahí al costado sintiéndose medio incómoda y con cara de no haber entendido a que bulto se refería su amiga si el chico ese no traía ningún bolso.
En cuanto empieza el recital, Jennifer se pone adelante de todo y empieza a hacerle caritas y a tirarle unas sutiles indirectas al tipo, llevando una de sus manos cerrada hacia su boca haciendo un ligero movimiento de vaivén mientras mueve la lengua por el interior de sus mejillas.
“¿Le estás diciendo que se vaya a lavar los dientes?” pregunta Needy que la observaba medio extrañada y era mas boluda que el agua de los fideos.
“Si, si” le dice Jennifer mirándola con fastidio, mientras sigue entretenida en lo suyo.
En eso estaban cuando, de repente, misteriosamente se produce un cortocircuito y se empieza a prender fuego todo.
En segundos, se desata un terrible incendio que destruye por completo el lugar, y del que Needy y Jennifer apenas logran escapar con vida.
Una vez a salvo, Needy intenta hacer reaccionar a su amiga que parece haber quedado en shock, mientras ve horrorizada como el lugar se convierte en un infierno y hay gente que corre envuelta en llamas y gritando.
De repente, se aparece el pibe de la banda lo mas pancho tomándose un drink como si nada.
“¡Que cagada eh!” dice el muchacho “Decí que salieron”.
“Si” dice Needy “Pero mi amiga está mal”
“Uh no me digas. ¿Sabés que le puede hacer bien a tu amiga?” propone el rockstar “Venir a dar una vuelta en mi camioneta con los chicos de la banda”
“Nonononono. De ninguna manera. Ella no va a ir. Ella se viene conmigo” le responde Needy con tonito de maestra pero, antes de darse cuenta, Jennifer se había subido a la camioneta de los pibes y se había ido al carajo.
Needy se vuelve para su casa muy angustiada y enseguida lo llama al papafrita del novio y se pone a contarle todo lo que había pasado, pero en el medio de la charla siente que alguien le toca frenéticamente el timbre.
Lentamente baja a abrir toda cagada, y, en una escena nunca vista en la historia del cine de terror, cuando abre la puerta ya no hay nadie.
Vuelve a entrar y se va a la cocina a prepararse un fernet para calmarse un poco, cuando de repente se encuentra cara a cara con su amiga Jennifer que está toda sucia, con la ropa rota y casi completamente cubierta de de sangre.
“Uh ¿Qué pasó? ¿Chocaron?” pregunta la pavota de Needy.
Jennifer la mira sin decirle una palabra, se da vuelta, le abre la heladera, le saca un pollo al spiedo que había ahí guardado y se lo empieza a comer ahí nomás en el piso.
“Che, no es por nada pero ese es mi almuerzo para mañana. Si tenés hambre decime y te preparo algo. Me parece que es medio desubicado de tu parte agarrar comida de mi heladera sin pedir permiso ¿viste? Esto no es un tenedor libre. Además usá un plato por lo menos. No seas sucia” empieza a decir Needy en un tonito muy fastidioso, pero Jennifer la interrumpe pegándole un alarido monstruoso en la cara.
Después se ríe, le vomita todo el piso, se saca un moco, se lo pega en el pelo, le dice “Chau” eructando y se va medio tambaleando.
Needy se queda pasmada y pensando en el garrón que iba a ser tener que limpiar todo ese chiquero pero, también, como era sumamente perspicaz, sospechando que algo raro pasa con su amiga.
Al otro día, vuelven a encontrarse en el colegio, y, para sorpresa de Needy que ya no entiende nada, Jennifer está reluciente, deslumbrante y mas perra que nunca, actuando como si nada hubiera pasado, y totalmente ajena, además, al ambiente de pesar que reina en el ambiente debido a la tragedia del incendio.
Días después, y tras sucederse otras misteriosas y terribles muertes de hombres jóvenes, Needy comienza a tener extraños presentimientos y a ser perseguida por unas perturbadoras visiones de Jennifer en una versión demoníaca, por lo que deberá dejar de lado sus sentimientos para intentar descubrir que es lo que se oculta detrás del angelical rostro y las perfectas curvas de su mejor amiga.

Y desde aquí hasta el final, todo comienza a girar sobre lo mismo, hasta llegar a un desenlace tan poco elaborado y tan carente de originalidad que, fácilmente, uno lo puede presuponer sin demasiado esfuerzo casi desde el principio mismo de la película.
No conformes con eso, guionista y directora ofrecen una trama que carece casi por completo de “climax” ya que el misterio de la historia queda develado rápidamente, y únicamente se logra mantener algo de interés por el hecho de tener que esperar para saber que es lo que pasó con la protagonista luego de irse en la camioneta con los muchachos de la banda.
Mas allá de eso, el argumento no logra profundidad en ningún momento y solo se sostiene por las escenas de pretendido suspenso y los, por momentos, exagerados toques gore de ciertas escenas. Quizás la cosa podría haberse salvado con unos buenos efectos especiales, pero estos no solo no le aportan nada al relato, sino que son de una factura bastante pobre y no van mas allá del nivel de lo que podría verse en cualquier capítulo de la serie “Supernatural”.
La banda sonora, por otro lado, se nota innecesariamente estridente y únicamente sirve para hacer que todo termine pareciendo un largo video clip.
En cuanto a las actuaciones, obviamente el punto fuerte es la participación de Megan Fox, en el papel de Jennifer Check, y por punto fuerte no me refiero a su desempeño, por supuesto, que deja bastante que desear, pero eso, en definitiva, no le importa absolutamente a nadie. Lo importante es que la mina está tan pero tan buena, que toda la película se basa en mostrarla con violentos primeros planos y explotando casi al máximo el hecho de que la cámara la adora (al igual que todos los hombres presentes en la sala).
La acompañan Amanda Seyfried como Needy Lesnicky, Adam Brody como Nikolai, Johnny Simmons como Chipp, y J. K. Simmons como el Sr. Wroblewski entre otros.
La película fue dirigida por Karyn Kusama que también ha dirigido cosas como “Aeon Flux” y un episodio de la serie “The L Word” y que, bueno, es una mujer y mucho no se le puede pedir, salvo que sea realista y se vaya a lavar los platos, al igual que la guionista Diablo Cody ya que, ambas, se la creyeron demasiado.

Calificación: 2 Renegados (Regular tirando a mala. Una propuesta de terror adolescente, mediocre y para nada original, sostenida casi exclusivamente por la belleza de Megan Fox).

Recomendaciones: Si Ud. es hombre vaya a ver esta película. Es mala, si, pero Megan Fox es una cosa que no se puede creer de lo buena que está.
Si Ud. es mujer, no vaya, a no ser que quiera salir sintiéndose un bicho canasto y pasar deprimida el resto del día.
Si Ud. es hombre y va al cine acompañado de su mujer, ojo, porque puede ser peligroso el hecho de que no le pueda explicar por que a partir de ver la película, se larga a llorar cada vez que la mira.

Dato importante: Si después de todo esto aún no se decide a ver esta película, solo me queda una cosa por decirle: Megan Fox, en remerita corta, culotte, con medias deportivas tres cuartos, iniciando a su amiga en las delicias del lesbianismo.

Nada mas. Ahora puede decidir.

viernes, 2 de octubre de 2009

Algo para pensar...

”Como es arriba es abajo” dijo alguna vez Hermes Trismegisto en la Tabla de Esmeralda para significar, de forma alegórica, que todo lo que hay abajo, en la tierra, es como lo que hay arriba, en el cielo.

“Como es adentro es afuera” han dicho, a su vez, los sabios hindúes, para sintetizar la enseñanza de que para poder realizar los cambios en nuestro entorno, primero se debe realizar un profundo cambio interior.

Antiguas y profundas lecciones de sabiduría éstas, que lo que han intentado desde tiempos antiguos es hacernos comprender que, en el Universo, todo se corresponde, que todo está inevitablemente interrelacionado, que por mas individualistas que creamos ser, desde el principio y hasta el final de nuestra existencia física, solo seremos una ínfima parte del todo.

Por eso, con estos preceptos en mente, comprendiendo que nuestros cuerpos son en este plano de existencia únicamente los vehículos que se nos han proporcionado para transitar por esta vía a la que llamamos “vida”, y que nuestros pequeños microcosmos personales han de poseer, seguramente, su correspondencia en el macrocosmos que nos rodea, la pregunta hondamente filosófica de la semana es:


¿Es el ombligo el equivalente en nuestro cuerpo del Triángulo de las Bermudas en el planeta Tierra, y por eso es que parece atraer magnéticamente las pelusas hacia los abismos de sus profundidades? ¿Eh?



Se los dejo para que lo reflexionen.


Buen fin de semana.

martes, 29 de septiembre de 2009

Crítica de cine: SECTOR 9

Antes que nada, si algo habría que decir de esta película a manera de advertencia es que es rara. O, al menos, que no es una producción de formato convencional y que, por este motivo, habrá a quienes les encantará y la juzgarán como una verdadera perla, mientras que a otros, quizás, no les guste ni medio y salgan de la sala a las puteadas y pensando en ir a pedir que le devuelvan la plata de la entrada.
Es una película de ciencia ficción y extraterrestres, si, pero una que poco tiene que ver con aquellas a las que tal vez estemos acostumbrados.
Para empezar, está filmada con cámaras de mano, como si fuera un documental (por si no lo recuerdan, es un formato parecido al de “Cloverfield”, aunque en este caso por suerte usado con mas criterio y menos movimientos espasmódicos), y si bien su costo de producción fue millonario, lejos está de ser esa típica película pochoclera, apoyada en el carisma de alguna figura conocida interpretando al héroe que salva las papas en la última media hora, adornada con todo tipo de efectos especiales.
En este caso, mas bien, el punto fuerte y protagonista absoluto del argumento es el profundo mensaje social que se expresa y, a su vez, la soberbia radiografía que hace de nosotros, la humanidad, como especie.

Sinocsi

Es el año 1981 y la humanidad consigue, por fin, dar respuesta al antiguo interrogante de si habrá vida inteligente en el Universo, cuando, como peludo de regalo, se aparece sobre la ciudad sudafricana de Johannesburgo una gigantesca nave nodriza extraterrestre.
Las grandes potencias del mundo se ponen en alerta temiendo que este sea el principio de un ataque a gran escala de una civilización súper avanzada o algo así, pero el tiempo pasa y la nave no mueve ni un pelo (principalmente porque era una nave espacial y usualmente no tienen pelo) y solo se queda estacionada ahí, flotando sin hacer nada como una pavota.
Después de un tiempo y ya medio aburridos de esperar, al ver que estos marcianos pecho frío no le ponían onda a la cosa, las fuerzas terrestres envían a unos equipos especiales hasta la nave para que vean si le pueden hacer algún agujero por algún lado para meterse a chusmear que había adentro, y de paso para aclararles a los tripulantes, si es que los había, que acá, en la Tierra, llegar y no salir ni a saludar es de muy mala educación.
Una vez en el interior del ocni, lejos de encontrarse con seres altamente evolucionados y montones de cosas así deslumbrantes y copadas, los humanos se encuentran con que estaba lleno de unos bichos bastante fuleros, parecidos a langostas, todos mugrientos, enfermos, medio muertos de hambre y con olor a pata que, aparentemente, eran refugiados de su propio planeta.
“¡Puta madre!” se escuchó declarar a un importante líder mundial al enterarse de la noticia “Tras que tenemos pocos pobres acá, encima nos caen estos bichos de garrón. ¡Que suerte pa’ la desgracia m’hijo!” concluyó mirando a cámara y realizando una lograda imitación de Pepe Biondi .
Sin embargo, dado que, por lo que se podía apreciar, la nave se había quedado sin gasoil y no iba ni para a tras ni para a delante, y esos pobres bicharracos no tenían donde ir, un poco por quedar bien y otro poco porque descubrieron que traían algunas armas de alta tecnología y se las querían rapiñar, se decidió bajarlos, darles algo de comer, pegarles una enjuagada y dejarlos que se asienten mas o menos en un rancherío ahí en las afueras de la ciudad.
A raíz de esto se creó una agencia multi nacional privada llamada MNU (Multi Nations United), especialmente dedicada a ocuparse, a partir de ese momento, de todos los asuntos concernientes a los alienígenas mientras durara su estadía en nuestro planeta.
La cuestión es que estos bichos resultaron bastante confianzudos, y unos pocos años después ya andaban como pancho por su casa, mezclándose con la población y haciendo toda clase de quilombos (se mamaban, tocaban timbres y salían corriendo, le gritaban cosas a las minas que pasaban mientras se tocaban, sacaban fiado y después no pagaban, pateaban las bolsas de la basura, se robaban los sifones de la puerta, etc.) y esto, sumado a que eran bastante roñosos en sus costumbres, como que a la gente de ahí mucho que digamos no le gustaba, por lo que la relación se empezó a resentir y la convivencia y la hermandad solidaria intergaláctica se fue yendo cada vez mas al carajo.
Debido a eso, finalmente se tuvo que terminar cercando el asentamiento extraterrestre y prohibiéndole la salida a sus habitantes, cosa de que no se mezclaran con la población terrestre y se dejaran de hacer bardo.
A partir de entonces el sitio fue denominado como Sector 9, y se convirtió en una especie de favela alien en la que convivían, además, con una pandilla de nativos insurgentes traficantes de armas, algunas trolas medio baqueteadas y pibes chorros fumapaco.
De todas formas, esto tampoco conformó a los ciudadanos de Johannesburgo que vivían en los alrededores, mas que nada porque los aliens, como no tenían televisión ni yerba y a los preservativos se los comían creyendo que eran chicles globo, se entretenían teniendo aliencitos, y el asentamiento se hacía cada vez mas y mas grande, lo cual daba lugar a que cada vez mas seguido se siguieran generando incidentes y hechos de violencia por parte de ambos lados.
Incluso del lado de los extraterrestres había uno medio gordo, con voz algo gay, que se la pasaba provocando y diciendo “¡¡¡Tssk clic grrrrock prrrp tic tic grrooomp click grrrick toc!!! (Traducción: “¡¡¡Los odio!!! ¡¡¡Odio a la puta oligarquía terrícola!!! ¡¡¡Odio sus casas, sus autos, su plata!!! ¡¡¡Los oddddiooo!!!).
Tanto se fue pudriendo el asunto que, al final, a la MNU como gran solución no se le ocurrió mejor idea que armar un operativo consistente en mudar a todo el langosterío alienígena a una especie de campo de concentración cercado ubicado bien lejos de la población.
Para ello, y en un afán de darle cierta legalidad al hecho, primero debían lograr que cada una de las mas o menos dos millones de langostas marcianas se dignaran a firmar un formulario de consentimiento del desalojo, cosa que no resultaría nada fácil ya que los aliens eran feos, sucios y quilomberos pero no boludos.
Para encabezar este operativo, el Director de la MNU designa a su yerno Wikus van der Merwe, un cuatro de copas muy entusiasta pero bastante pelotudón que, ya durante la primer jornada del operativo y luego de haber tenido no pocos inconvenientes, mientras estaba requisando uno de los ranchos, por hacerse el pistola y manipular cosas que no conoce, accidentalmente se salpica todo con un líquido medio raro.
Aunque al principio lo único que le preocupó fue la cagada a pedos que se iba a ligar de parte de su mujer por haberse manchado la camisa, a las pocas horas comenzó a pensar que quizás la cosa podría ser un poco mas grave cuando empezó a sentirse enfermo, le salió una cosa negra de la nariz y se le empezaron a caer la uñas y los dientes.
Al poco tiempo, después de descomponerse, vomitar, y hacerse lo segundo encima, termina internado en un hospital, donde los médicos le confirman que algo no está bien con su salud, principalmente luego de ver que, además de todo lo que le pasaba, una de sus manos había mutado en una especie de pinza de tres dedos.
Este hecho, de inmediato llamó la atención de los científicos del MNU que desde hacía veinte años habían estado intentando infructuosamente hacer funcionar las armas que les habían robado a los extraterrestres y habían fracasado por estar codificadas para su ADN.
Intuyendo que, de alguna manera, el ADN de Wikus se había fusionado con el ADN alienígena, enseguida lo vieron como el elemento fundamental que habían estado necesitando para lograr su objetivo, por lo que le pidieron que se copara y los dejara cortarlo en pedazos para hacer experimentos.
A Wikus no solo no le convenció mucho la idea sino que hasta se lo tomó a mal, se puso medio loquito, rompió todo, renunció a su Obra Social, fajó a un par de médicos, le tocó el culo a una enfermera y se dio a la fuga.
A partir de ese momento, y merced a una estrategia promulgada por su mismo suegro (que a esta altura ya queda claro que no se lo bancaba ni un poco) de hacerlo quedar como un terrorista traidor a la Tierra que se vendió a los aliens, Wikus debe renunciar a su esposa (principalmente porque el divino del suegro le dijo que lo que le pasaba era por empomarse a una de las langostas), a su familia y a todo lo que conocía para convertirse en un mutante fugitivo que solo encontrará refugio en el sordido Sector 9.
Una vez allí, accidentalmente descubrirá el secreto que se esconde en ese lugar y, con él, la esperanza de volver a la normalidad y recuperar su vida pero, para conseguirlo, deberá necesariamente formar inesperadas alianzas y enfrentar no solo a los escuadrones de la MNU que lo buscan sin descanso, sino también a toda clase de peligros para los que nunca pensó estar preparado.

Mas allá de algunos de los primeros tramos que pueden resultar algo lentos, la película logra captar, casi desde el principio, el interés en la trama, la cual por momentos se torna dura, con algunos destellos que muestran con decidida crudeza la intolerancia y la crueldad de que somos capaces como especie, y este hecho, sumado al de presentarse en este formato de tipo documental, sin dudas, le suma un particular toque extra de realismo a la historia que resulta muy bienvenido.
Esto está sustentado, obviamente, por la excelente factura de los efectos especiales y sonoros, con los cuales han logrado que los personajes generados digitalmente (todos los aliens, por ejemplo) se vean perfectamente integrados a la acción y no desentonen en ningún momento.
A pesar de lo que podría temerse luego de los primeros minutos, la acción y la dinámica argumental van incrementándose con el correr de la película, logrando un ritmo entretenido, con muy pocos altibajos, y que se incrementa notablemente hacia el final de la cinta.
En cuanto a las actuaciones, a pesar de haber convocado a actores que no son muy reconocidos en el medio, se ha logrado realizar un trabajo por demás convincente, sobrio y que se complementa correctamente con el resto de la cinta y el sentido que se le quiso dar.
Ellos son: Sharlto Copley como Wikus van der Merwe, David James como Koobus, Jason Cope como Christopher Johnson, Mandla Gaduka como Fundiswa Mhlanga, y Vanessa Haywood como Tania entre otros.
La película fue dirigida por Neill Blomkamp y producida por Peter Jackson.

Calificación: 3 Renegados y medio (Buena. Una gran propuesta de ciencia ficción presentada de manera original, de excelente realización y sustentada por un argumento duro y no poco realista acerca de la naturaleza humana).

Recomendaciones: Si Ud. espera ver algo como “Dia de la Independencia” no vaya, porque va a salir caliente.
Si a Ud. le gustan las películas con marcianos raros y cosas medio asquerosas vaya que le va a gustar.
Si Ud. le tiene miedo a los bichos no vaya porque puede salir traumado, o capaz que grita en medio de la función y es un papelón.